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jueves, 31 de marzo de 2016

Cómo combatir las estrías

Ahora que ya llega la primavera y, con ella, el calor y un vestuario más ligero, empiezan a ser más visibles esas molestas estrías que afectan a muchísimas personas. Podemos decir que las estrías son cicatrices del tejido conjuntivo: atrofias cutáneas en forma de líneas sinuosas de color blanquecino o amoratado que se observan por transparencia a través de la epidermis. Generalmente, se localizan en la pared del vientre, caderas, nalgas, muslos y senos. Las personas que tienen estrías no tienen por qué tener sobrepeso, las causas de su aparición son múltiples y, por lo tanto, gran parte de la población ha tenido, tiene o tendrá estrías en un futuro. Se convierte, pues, en un problema estético tanto para hombres como para mujeres.


Pueden aparecer a muy temprana edad, ya que el crecimiento es una de sus causas, pero existen otros motivos como el embarazo o el aumento o la disminución de peso repentinos –durante los cuales se produce un estiramiento de la piel en poco tiempo, con la consecuente rotura de las fibras epidérmicas–, el estrés, algunas enfermedades hormonales o incluso algunos medicamentos.


La tecarterapia de Capenergy permite realizar un tratamiento de las estrías en dos niveles: preventivo y paliativo. La nutrición intensa que Capenergy produce en las capas profundas de la piel a través del incremento circulatorio constituye una ayuda valiosa en la prevención de nuevas estrías, al disponer de un tejido más elástico y oxigenado. Cuando las estrías ya se han manifestado, Capenergy acelera su cicatrización, regenerando los tejidos con mayor velocidad hasta hacer desaparecer las estrías y hacerlas invisibles. Al tratarse de un tejido fracturado en profundidad, la cicatriz permanecerá activa al tacto, pero se disimulará su presencia visualmente gracias a la regeneración de la piel y a su fortalecimiento mediante el incremento de su nutrición. Los resultados en estos casos están vinculados a la edad de los pacientes, así como a su calidad de piel, por lo que se establece una horquilla entre 5 y 50 sesiones en función de la reacción del paciente al tratamiento.

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