Efectos de la transferencia eléctrica capacitiva de Capenergy en el tejido dérmico y adiposo

Existen actualmente en el mercado diferentes tecnologías en el campo de la estética para tratar el tejido graso, como es el caso de los equipos de cavitación, termolipólisis y radiofrecuencia, entre otros. El uso de estas tecnologías evita recurrir a liposucciones o lipoesculturas que, en ocasiones, resultan traumáticas para el paciente o generan cicatrices visibles, con el agravante proceso post-operatorio que es doloroso y molesto por su lenta recuperación.

Diferentes estudios demuestran que la utilización de corrientes de alta frecuencia con aplicación capacitiva en tratamientos estéticos es realmente efectiva para la disminución del tejido adiposo subdérmico. Este tipo de corriente alterna se sitúa entre 0,8 MHz y 1,2 MHz de frecuencia, generando un efecto condensador entre los electrodos y el cuerpo del paciente. Este fenómeno produce un aumento de temperatura que presenta una penetración de varios centímetros en el tejido, a través del cual se logra disminuir la grasa subdérmica localizada incrementando el colágeno y mejorando la flacidez cutánea.

El sistema capacitivo de Capenergy permite una aplicación automática que facilita el trabajo al profesional para su aplicación ya que no le implica un trabajo manual, lo cual supone un gran ahorro de esfuerzo físico en función de las zonas a tratar y el número de pacientes atendidos por día. Asimismo, con el tratamiento automático capacitivo con placas se pueden tratar diversas partes del cuerpo y se puede alternar con tratamientos manuales en una misma sesión, con lo que se pueden conseguir más y mejores resultados acortando los tiempos de trabajo incrementando el grado de satisfacción del paciente. Mediante la disposición de electrodos de diferentes tamaños se favorece dirigir y facilitar el drenaje, adaptándose de este modo a los morfotipos de cada paciente y las dimensiones de la/s zona/s a tratar. Además, el efecto de mesoterapia virtual con el sistema capacitivo manual permite la penetración de productos lipolíticos obteniéndose muy buenos resultados, que favorecen una mayor combustión de las grasas.

Este tipo de tratamientos permite conseguir en pocas sesiones una pérdida importante de grasa localizada en centros de medicina estética y fisioestética, implantándose como una técnica habitual y generalizada en este tipo de centros.